Existe el mito de que, dado que se necesita testosterona para producir esperma, cuando se eyacula mucho, ya sea por masturbación o por tener relaciones sexuales regulares, se agotan las reservas de testosterona, lo que causa niveles bajos de testosterona y provoca disfunción eréctil.
Esto no es cierto, ya que la producción de testosterona en las células de Leydig es un proceso continuo.
Las personas que eyaculan mucho están insensibilizadas a los estímulos sexuales debido a la inundación de dopamina en los centros de placer, y con frecuencia les interesa menos el sexo.
Cuando se miden sus niveles de testosterona, estos generalmente son normales.
Buscando en Pubmed me encontré con este artículo frecuentemente citado por Jiang et al de Hangzhou: [Cambios periódicos en el nivel de testosterona en suero … [Sheng Li Xue Bao. 2002] que demostró que durante 6 días después de la eyaculación, el nivel de testosterona en suero permaneció más o menos igual, en el séptimo día llegó al 147% y luego volvió a nivelarse al nivel anterior.
No estoy seguro de lo bueno que es este sitio web, pero su contenido es interesante sin embargo: Los efectos de la masturbación en la testosterona
Nada encontrado en la cognición.
