Por definición, un probiótico es un suplemento que estimula los microorganismos en crecimiento, específicamente aquellos con propiedades beneficiosas (es decir, microflora intestinal). Los probióticos no causan directamente la muerte de otros microorganismos. Por ejemplo, toma un probiótico que promueve el crecimiento de especies de Lactobacillus . Los lactobacillus comienzan a crecer en el colon y, a medida que crecen, producen ácido láctico. El ácido láctico reduce el pH del entorno del colon. Un entorno de pH bajo generalmente no es adecuado o preferido para los patógenos (las bacterias “malas”), por lo tanto, el lactobacilo crece y supera a los patógenos disminuyendo el riesgo de infección.
Quizás pueda decir: “Al tomar suplementos probióticos con el tiempo, el riesgo de una infección bacteriana, como el cólera y la disentería, puede reducirse”. La investigación concedida es aún bastante preliminar cuando se trata de la efectividad de los probióticos utilizados por sí mismos para prevenir / acortar el período de infección de ciertas enfermedades. La infección por Clostridium difficile es una de las más estudiadas y de la que he leído más.
