La uremia es un estado clínico en el que el nivel de nitrógeno ureico en sangre, un indicador de los productos de desecho de nitrógeno, es elevado. En la uremia, la falla de los riñones para filtrar el desecho de nitrógeno conduce adecuadamente a niveles excesivamente altos de desechos de nitrógeno en el torrente sanguíneo.
La uremia es potencialmente mortal porque demasiado nitrógeno en la sangre es tóxico para el cuerpo. Los síntomas de la uremia incluyen confusión, pérdida del conocimiento, baja producción de orina, boca seca, fatiga, debilidad, palidez o palidez, problemas de sangrado, frecuencia cardíaca rápida (taquicardia), edema (hinchazón) y sed excesiva. La uremia también puede ser dolorosa.
La uremia es reversible si se trata rápidamente; sin embargo, daño permanente a los riñones puede ocurrir. La insuficiencia renal también puede ser el resultado de procesos subyacentes que causan uremia.