¿Cuál es la historia evolutiva del sacro? En particular, ¿cómo llegaron los foramina?

La respuesta aparentemente obvia es que el sacro fue (en algún punto distante de nuestra evolución) un conjunto de vértebras separadas que se fusionaron en una sola estructura para proporcionar un mejor soporte estructural a la pelvis y la espalda. Todos los vertebrados de dos y cuatro patas tienen alguna versión del sacro, por lo que es un desarrollo primitivo, posiblemente relacionado con la evolución de las piernas y la locomoción no acuática.

Los agujeros no habrían evolucionado específicamente, sino que habrían sido los espacios que quedaron cuando los diversos procesos espinosos y transversales (de las vértebras originalmente separadas) se fusionaron.