¿Las prostitutas no temen contraer el VIH u otras enfermedades?

Las trabajadoras sexuales son muy conscientes del elevado riesgo de VIH y otras ETS involucradas en su “oficio”, por así decirlo. Prueba de esto se encuentra en su uso alto y constante de protección.

En América Central, por ejemplo, varios estudios han demostrado que la tasa de VIH (sin contar otras ETS) entre las trabajadoras sexuales a menudo era inferior a la del promedio nacional debido al uso constante de preservativos entre ellos y sus clientes.

La situación con respecto al uso del condón puede variar de un país a otro, o incluso de una ciudad a otra, pero no disminuye el hecho de que las trabajadoras sexuales promedio aún se preocupan mucho por su salud.