Preséntate como paciente. Su conocimiento del tema siempre ayuda pero no debe hacerlo dominar al médico, incluso cuando no está de acuerdo.
Ayuda a ser educado con todo el personal del hospital. Tu manierismo habla por sí mismo.
Ser puntual. Honra la cita.
Ve preparado para preguntar todo lo relevante pero sin contar historias. Mantenga su archivo en orden. A los médicos les gustan esos pacientes.
Finalmente muestra tu gratitud Hace puentes.
Todos recuerdan a personas buenas y reuniones agradables especialmente cuando están estresadas. (Recuerde, a veces el médico puede estar más estresado que el paciente)