Los virus han encontrado múltiples soluciones. Tres de los más comunes:
- Mutación rápida de regiones a las que se unen los anticuerpos, de modo que los anticuerpos formados previamente contra el predecesor del virus ya no son efectivos. La gripe y el VIH son los más famosos en esta clase, pero hay muchos otros
- Un ciclo de vida que evita el contacto con anticuerpos. Los anticuerpos actúan predominantemente fuera de las células, por lo que los virus que pueden propagarse directamente de una célula a otra pueden evitar muchos de los efectos de los anticuerpos. Los herpesvirus son el principal ejemplo aquí
- Proteínas virales específicas que inactivan anticuerpos. Los virus de ADN complejos como poxvirus y herpesvirus son los más propensos a hacer esto.
Estos no son mutuamente exclusivos, y su importancia relativa depende de los detalles de la interacción virus / host.