Hay algunas cosas que me molestan sobre el diseño del estudio aquí, lo que me hace ser escéptico de las conclusiones.
En primer lugar, este es un estudio de cohortes que se basó en informes de encuestas. Esto es problemático porque depende de los padres para ser historiadores precisos, en lugar de utilizar datos objetivos y empíricos. Este tipo de recopilación de datos puede dar lugar a un prejuicio debido a que los recuerdos de los padres que rodean la circuncisión pueden verse afectados por el paso del tiempo, así como por la sospecha inconsciente de los padres de que la circuncisión dio lugar al autismo.
En segundo lugar, estos niños fueron incluidos como autistas si sus padres informaron que se había hecho un diagnóstico de este tipo. No se realizaron pruebas controladas e independientes para determinar si los niños tenían ASD o no. Esto es problemático porque no hubo confirmación para determinar si su grupo experimental realmente tenía o no el trastorno en cuestión. Tampoco se hizo ninguna comparación para ver la correlación entre la severidad del TEA y la circuncisión. ASD es una condición extremadamente variable, y es problemático agrupar a todos los niños en un solo grupo.
En tercer lugar, y lo más importante en relación con la OMI, es que este estudio incluyó solo circuncisiones realizadas en niños que tenían antecedentes culturales judíos o musulmanes. El problema con esto es que invita a lo que se llaman variables de confusión. Hay mucho sobre ASD que no conocemos, incluida la existencia de una base genética. Es bien sabido en medicina que algunas culturas y etnias llevan predisposiciones genéticas para condiciones particulares. La enfermedad de Tay-Sachs es un buen ejemplo, que aparece en una frecuencia mucho más alta entre los judíos Ashkenazi. En este estudio, al solo mirar a los niños de dos contextos culturales seleccionados y al no poder comparar estos datos con una cohorte de niños de una diversidad más amplia de etnias, los investigadores pueden estar perdiendo otra causa del aumento en ASD. El hecho de que vieron un aumento en ASD entre los niños circuncidados de estos grupos podría estar relacionado con otros factores ambientales que son más comunes en las familias devotas de cada cultura que tienen más probabilidades de practicar la circuncisión ritual.
En general, el documento me parece interesante, pero definitivamente me gustaría ver un estudio hecho que carezca del sesgo de selección que veo aquí antes de formar una opinión.