Puedo dar evidencia anecdótica de la experiencia de mi familia.
En 1990, mi abuela materna Margherita vivió 5 meses después del diagnóstico con el tratamiento disponible en ese momento. En 2008, mi tío Michael (su hijo menor) murió 5 semanas después del diagnóstico. Este año, mi primo materno Kevin murió después de 9 meses.
Los 3 fueron diagnosticados en la Etapa 4. Ninguno era operable y Michael estaba en una etapa muy avanzada.
Tuve la suerte de haber sido diagnosticado en la Etapa 1 y elegí someterme a la cirugía lo antes posible. Tres semanas después del diagnóstico me sometí a un Whipple modificado. En ese corto tiempo, el tumor había crecido a la Etapa 2. Luego me sometieron a 6 meses de quimioterapia, comenzando 6 semanas después de la cirugía. No he tenido recurrencia o metástasis, aún.
