la tomografía computarizada de perfusión se usa con más frecuencia porque requiere una tecnología barata y fácilmente disponible (CT) y la potencia. Es útil en un accidente cerebrovascular agudo (0-4 horas después del inicio de los síntomas) para la planificación del manejo: recuperación de coágulos versus trombólisis versus conservador.
Se puede realizar MR de perfusión, pero la resolución no es buena y es poco probable que obtenga mucha información útil que no puede obtener en imágenes DWI y FLAIR. Además, cuando las personas se meten en el imán, generalmente se encuentran fuera de la ventana para el tratamiento del accidente cerebrovascular agudo.