En realidad, depende mucho de lo que es “la forma habitual” para un diabético.
Es cierto que no hay una dieta específica para diabéticos porque todos reaccionamos a diferentes alimentos de diferentes maneras.
La recomendación es comer cuatro o cinco veces al día, a intervalos regulares y en cantidades más pequeñas que la mayoría de nosotros estamos acostumbrados a comer a la vez.
También hay algunos alimentos que son mejores para nosotros y otros que son mucho peores para nosotros. Tomamos decisiones de forma continua.
El objetivo es mantener nuestros niveles de glucosa en sangre más o menos constantes y en números que se consideran más seguros para los diabéticos.