En primer lugar, no deberías sentirte mal o responsable de esta situación. No causaste el dolor de tu madre y pareces bastante empático al respecto, así que sé bueno contigo mismo.
En segundo lugar, debes seguir alentando a tu madre a buscar soluciones. Dependiendo del tipo de dolor y del diagnóstico previo, puede considerar acudir a un médico de terapia alternativa, como un osteópata o quiropráctico, acupunturista o médico de TCM.
Es difícil ser un cuidador y observar a las personas con dolor, sin embargo, usted no es el responsable de que ella tenga el dolor.