No es necesario por ética divulgar su información de salud a los miembros de su familia a menos que la no divulgación les cause daño.
Déjame darte un ejemplo
Si padece VIH, es absolutamente necesario que se lo comunique a su pareja sexual.
Si sufre de un tipo de cáncer de colon familiar en la cincuentena, es absolutamente necesario divulgarlo a sus hijos para que puedan hacerse una colonoscopia de detección en 20 segundos. Al no revelar, estás perjudicando sus vidas. Pero, si su hijo es mucho menor de 20 años, está perfectamente bien no divulgarlo, ya que el cribado comienza en solo 20 años.
En su caso, existe una posibilidad insignificante de tener una enfermedad coronaria que amenaza la vida de sus hijos (que no son mayores de 50) debido a su enfermedad de la arteria coronaria. No hay daño en ocultar su información de salud.
La elección es tuya.