Brandy no era raro de ver en el formulario en los años 90 cuando era residente.
Algunos proveedores fueron lo suficientemente sabios como para reconocer que simplemente le podías dar una cerveza a un paciente para que se quitara el borde cuando eran pacientes hospitalizados a quienes se les retuvo la bebida que elegían. Me pareció ridículo que le diera medicamentos recetados cuando enfrentaba los “ronques” en vez de darle al paciente lo que iban a comenzar a usar nuevamente al momento del alta en el día siguiente.
Cuando jugamos Jeopardy en aquel entonces, mi pregunta final sobre Jeopardy era con regularidad: ¿Qué cerveza hay en el formulario ahora mismo si llama a la farmacia para pacientes internados? Siempre tuvieron algo. Típicamente, algunas latas de lo que el último paciente prefirió estaban disponibles para el consumo. No estoy seguro si los hospitales todavía practican de esta manera hoy en día.