Hay varios anestésicos tópicos disponibles en el mostrador. La elección depende de para qué se está utilizando. Por lo general, usamos anestesia tópica inmediatamente antes de un procedimiento doloroso, como una inyección o un procedimiento con láser. Para los niños, podemos aplicar un anestésico tópico antes de la cirugía, pero solo para minimizar el “ouch” de la inyección de anestésico local. Estos anestésicos generalmente son una forma de crema o ungüento de lidocaína. De estos LMX es probablemente el más potente.
Dado que se trata de lidocaína, hay varias precauciones que deben tenerse en cuenta antes y durante su uso. La lidocaína puede absorberse a través de la piel (y particularmente a través de las membranas mucosas) y si se aplica a una superficie corporal suficientemente grande, puede poner en peligro la vida debido a su efecto sobre la frecuencia cardíaca. Por lo general, aconsejo la aplicación en un área pequeña durante un período corto (30-45 min). Además, la lidocaína tópica es bien conocida por su capacidad de causar una dermatitis de contacto alérgica. También prefiero que la aplicación de estas cremas anestésicas se haga en la oficina mientras el paciente está esperando un procedimiento, para que puedan ser observadas por cualquier reacción.
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Existen otros anestésicos tópicos como benzocaína (Oragel, Anbesol) o salicilatos (Bengay y otros), pero estos no son tan potentes aunque también pueden causar reacciones alérgicas.