Al igual que todos los demás profesionales de la salud médicos y afines, los fisioterapeutas también disfrutan de su rutina diaria y pacientes diversificados. Fuera de curso en un mal día, también se sienten agotados.
Los pasatiempos, la caridad, las actividades deportivas, el yoga y la meditación rejuvenecen su cerebro. Las salidas de fin de semana y las vacaciones vuelven a traer su encanto perdido.
Creo que la mayoría de los fisios son conscientes de la importancia de la salud mental y se esfuerzan por mantener la mente y el cuerpo sanos.