Las heridas emocionales son diferentes de las físicas. La curación es un proceso con diferentes etapas. El período de tiempo y los tipos de etapas difieren de persona a persona y de dolor a dolor. Tampoco es un proceso lineal, puede sentirse mejor y luego empeorar nuevamente. Puede subir y bajar todos los días.
La pregunta es, ¿en qué punto nos consideramos “sanados”? ¿Cuándo podemos levantarnos de nuevo? ¿Cuándo podemos volver a sonreír? ¿O podemos pasar un día o una semana sin pensar en ello?
Creo que un poco de dolor puede desaparecer por completo. Por ejemplo, estar enamorado de alguien que no respeta el amor puede ser una experiencia tremendamente dolorosa. La mayoría de nosotros lo hemos experimentado en algún momento. Pero a menudo, a medida que avanza nuestra vida, tal vez encontremos una pareja y al mirar hacia atrás ya no sentimos dolor por nuestra experiencia pasada. Nuestras perspectivas pueden cambiar, nuestras circunstancias pueden cambiar y el dolor ya no es relevante.
Aunque también hay experiencias de vida que siempre se mantendrán “tristes”. Perder a un ser querido, por ejemplo. No tenemos que definirlo ni pensarlo todos los días. Pero lo más probable es que si realmente lo pensamos, todavía sentiremos algo de dolor. ¿Eso significa que estás curado? Depende de tu definición
También creo que hay ciertas experiencias en la vida que tienen efectos a largo plazo en nosotros. Si te intimidan en la escuela por una característica específica, por ejemplo, podrías quedarte “herido” toda la vida y sentirte cohibido por ese rasgo. O te das cuenta de que eran solo niños y aprendes a amarte a ti mismo. Realmente depende de la persona.
En general, creo, o espero que cualquier herida se pueda curar hasta tal punto que alguien pueda llevar una vida feliz, al menos en teoría. Pero creo que mucha gente no tiene acceso a la ayuda o las habilidades necesarias para curarse a sí mismos.
