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PRONÓSTICO – Existe una tasa de mortalidad apreciable asociada con la meningitis bacteriana incluso con la administración de antibióticos apropiados.
Mortalidad : la tasa de mortalidad aumenta linealmente con el aumento de la edad. En un estudio de vigilancia de la población de los Estados Unidos entre 2003 y 2007, la tasa de letalidad de la meningitis bacteriana en adultos fue del 16,4 por ciento ; entre los pacientes entre 18 y 34 años de edad, la tasa de letalidad fue del 8,9 por ciento en comparación con el 22,7 por ciento en pacientes ≥65 años de edad [ 20 ]. La tasa global de letalidad no varió significativamente entre 1998-1999 y 2006-2007.
Los resultados también varían dependiendo del organismo. Las siguientes observaciones de diferentes períodos de tiempo ilustran el rango de hallazgos:
- En una revisión de 493 episodios de meningitis bacteriana en 445 adultos atendidos en un solo centro en los Estados Unidos desde 1962 hasta 1988, la tasa de mortalidad general fue del 25 por ciento y no varió a lo largo del estudio [ 3 ]. La tasa de mortalidad fue mayor con la infección nosocomial en comparación con la adquirida en la comunidad (35 versus 25 por ciento), y fue mayor con infección por S. pneumoniae y L. monocytogenes en comparación con N. meningitidis (28 y 32 versus 10 por ciento).
- En una serie de 248 pacientes atendidos en 1995 en hospitales de cuidados intensivos en 22 condados en cuatro estados de los Estados Unidos, la tasa de mortalidad fue más alta con S. pneumoniae y L. monocytogenes (21 y 15 por ciento, respectivamente) y la más baja con N. meningitidis (3 por ciento) [ 30 ].
- Un informe de los Países Bajos evaluó 696 casos de meningitis bacteriana aguda adquirida en la comunidad observados entre 1998 y 2002 [ 5 ]. La tasa de mortalidad general fue significativamente mayor con la meningitis neumocócica en comparación con meningitis meningocócica (30 frente a 7 por ciento). Además, un resultado desfavorable fue seis veces más común con la meningitis neumocócica, incluso después del ajuste para otros predictores clínicos.
Como James Byrne mencionó, los esteroides a menudo se usan junto con antibióticos para disminuir la hinchazón que ayuda con el tratamiento.
