No le daría un diagnóstico específico, en parte porque realmente no creo en la validez y la sabiduría del diagnóstico. Sin embargo, el diagnóstico más cercano es la distimia, o depresión leve a largo plazo.
Bojack lucha con la intimidad, la autenticidad, la baja autoestima y la soledad. Juntos, contribuyen a su distimia. Bojack recibió mensajes cuando era joven, de su madre, sobre su inutilidad e incapacidad para alcanzar la felicidad. Está avergonzado de cómo se siente dentro, triste, por lo que lo oculta de los demás (Wanda), con algunas excepciones (eventualmente, Diane) y en unos raros momentos de vulnerabilidad en bruto durante toda la temporada. Porque está demasiado avergonzado para ser él mismo, le falta intimidad con todos sus intereses románticos. La falta de intimidad que experimenta hace que rechace a su pareja y reafirma la creencia de su infancia de que no es digno de amor ni de la felicidad. Eso crea un nuevo problema para Bojack, que es su falta de esperanza, es decir, la ausencia de la creencia de que su vida funcionará y estará bien. También lo mantiene solo.
Tampoco aprendió ningún mecanismo de supervivencia: sus padres lucharon todo el tiempo y el Secretariado le enseñó a huir de sus problemas, por lo que repite sus errores, aunque eso establece la premisa del espectáculo, donde el público lo ve crecer. y aprende vicariamente cómo vivir y amar.