Higroscopía: ¿cómo se determina la higroscopicidad de una sustancia, químicamente? ¿Qué hace que algunas sustancias sean más higroscópicas que otras?

La higroscopicidad es la medida de la capacidad de un material para absorber o liberar agua en función de la humedad (es decir, la actividad del agua).

La forma ideal de medir la higroscopicidad sería crear una isoterma de sorción de humedad observando el cambio en el contenido de agua frente a la humedad relativa a temperatura constante.


Se puede medir esto usando herramientas como la sorción dinámica de vapor o el analizador de movilidad diferida Tandem. La humedad se puede medir con un higrómetro.

Para quienes no tienen un equipo de lujo, el contenido de agua puede medirse pesando el material húmedo, eliminando el agua con un desecador y pesando el material seco. Hacer esto para múltiples humedades le dará una curva similar.

Alternativamente, un método químico para medir el contenido de agua sería realizar una valoración de Karl Fischer. El sustrato se disolvería en un disolvente anhidro y se valoraría con dióxido de azufre, yodo y una base. Un mol de yodo es consumido por un mol de agua y usando la titulación coulométrica, se puede determinar el contenido de agua.

¿Cómo se vuelve un sustrato más higroscópico que otros? Todavía es un misterio, pero una buena suposición se basa en la cristalinidad del sustrato y el entorno electrostático del sólido.

La higroscopicidad se puede medir como la tasa de aumento del contenido de agua con la actividad del agua.