Muy poco. De hecho, muchas de estas compañías son maestros de la manipulación. Las leyes que rigen las etiquetas de alimentos y suplementos son una broma, y lo que es peor es el hecho de que enormes empresas de mil millones de dólares en el negocio de alimentos y suplementos, básicamente hacen lo que quieren. Por ejemplo, compra un suplemento de vitamina C y la etiqueta dice 1000 mg. Ahora, lo que la botella no te dice es que tendrás suerte si tu cuerpo absorbe el 10-15% de eso. O que la materia prima que usaron para hacer el suplemento proviene de China y es de baja calidad. Sin embargo, el precio de su producto sigue siendo alto. Es por eso que constantemente me esfuerzo por educar a mis clientes sobre cómo tomar la decisión correcta al comprar un producto. Créanme, lleva tiempo entender los pormenores. La conclusión es que estas compañías son muy difíciles de enjuiciar por etiquetar erróneamente o tergiversar sus productos. Por eso debemos educarnos y ser extremadamente vigilantes al comprar cosas que terminarán en nuestros cuerpos. Recuerde, no solo los alimentos y los suplementos terminan en nuestros cuerpos. Todo lo que ponemos en nuestra piel también se encuentra en el torrente sanguíneo. Así que mi consejo es ser cauteloso y vigilante, y siempre investigue. Tengo un próximo video llamado cómo leer y entender las etiquetas de los alimentos, que se transmitirá en mi nuevo canal de YouTube, Shawn’s Nutrition . Esto puede ayudarte.
Buena suerte
