¿Cómo debo mantenerme estable y emocionalmente fuerte frente a un pariente muy querido que padece una enfermedad crónica, en (tal vez) sus últimos días?

Ya sea un final repentino o prolongado y anticipado para una persona querida, la reacción emocional es casi la misma: Shock, negación, ira y finalmente aceptación. En última instancia, la aceptación es la única forma de avanzar.
Solo piense qué sería lo más importante en las mentes de aquellos que enfrentan la prueba? No pueden cambiar el destino, pero sin duda pueden obtener algún consuelo si ven que sus protectores han alcanzado la mayoría de edad y están listos para enfrentar el mundo real por su cuenta sin su presencia y apoyo, ¿no es así? Entonces, es su responsabilidad extenderles esa satisfacción al ser mentalmente fuertes y estables.
Recuerde, la vida es difícil. No puedes desear eso. Todo lo que puedes hacer es ser valiente para enfrentarlo. No puedes cambiar la dirección del viento, pero puedes cambiar la dirección de tus velas y llegar a un lugar seguro. Asimismo, debes desarrollar una actitud firme pero flexible para superar las vicisitudes de la vida. Todo lo mejor.