Desde el síndrome metabólico
Existen varias definiciones (incluidas las de la Organización Mundial de la Salud y el Panel de Tratamiento de Adultos III del Programa Nacional de Educación sobre el Colesterol); en cada definición, el diagnóstico se basa en la definición de valores para dislipidemia, hipertensión, intolerancia a la glucosa y obesidad, y la resistencia a la insulina generalmente se considera el vínculo común
Entonces ahora vemos la resistencia a la insulina como parte del síndrome metabólico.
En la práctica, nunca medimos la resistencia a la insulina, ya que no influye en las elecciones terapéuticas que hacemos.
Para disminuir la resistencia a la insulina ahora sabemos que uno debe hacer ejercicio y perder peso, además, algunos medicamentos antidiabéticos promoverán, por ejemplo, la metformina y las tiazolidindionas (por ejemplo, pioglitazona).
Las personas con sobrepeso se les recomienda hacer ejercicio regularmente y perder peso, independientemente de si tienen resistencia a la insulina o no, ya que lo desarrollarán, incluso la diabetes, si no lo hacen.
El tratamiento del síndrome metabólico no es diferente de tratar sus síntomas constitutivos por sí mismos.