Los efectos del exceso de flúor en el agua son bastante permanentes, especialmente cuando se trata de flurosis dental. El tratamiento depende de qué tan grave sea la afección. Hay una variedad de índices utilizados para calificar y evaluar la gravedad, el índice de fluorosis más utilizado es el de decanos.
Dependiendo del clima, se encuentra en etapas incipientes con solo moteado del esmalte o severo con manchas marrones y pérdida de la estructura dental. Se usan diferentes tratamientos.
Quitar al paciente el agua fluorada es lo primero. Luego están los empastes para defectos locales, para la estética hay chapas de cerámica, coronas, los defectos severos pueden requerir reparación, la decoloración severa puede necesitar carillas estéticas de boca completa o coronas. Los dientes totalmente arruinados se pueden extraer y reemplazar.
Los más afectados son los caninos y premolares, molares de los dientes superiores.
También hay severas sobrecargas de fluoruro que causan fluorosis esquelética y el bloqueo de la columna vertebral y las articulaciones que conducen a la rigidez y el crecimiento anormal de las extremidades. Eso requiere intervención quirúrgica.
