Hay varias razones. Los más comunes son:
- Aterosclerosis: acumulación de calcio y grasa en la pared del vaso.
- Trombosis: principalmente debido a la aterosclerosis. Sangrado y formación de coágulos en las lesiones ateroscleróticas.
- Embolus: un trozo de sangre coagulada transportada por la circulación a cualquier otro vaso
- Trauma: por interrupción de la integridad de la pared del vaso
- Presión al vaso por los tejidos circundantes, es decir, tumores, órganos agrandados, otros vasos dilatados, etc.