En 2010, pude vivir 76 horas cuando me diagnosticaron Lupus Nephretis Clase IV. Unos meses más tarde, se extendió a unos pocos meses o años, dependiendo de cómo reaccione al tratamiento. En 2013, se extendió a alrededor de 2 décadas porque hice bien con los medicamentos.
Sin embargo, hacia fines de 2013, comencé a trabajar en cambios en el estilo de vida, enfocados en la vida saludable, tratamientos alternativos (sigo creyendo en el tratamiento médico primario y el tener HCQS diariamente) para fortalecer mis poderes curativos internos. Funcionó para mí y puso a Lupus en remisión permanente.
Entonces, la conclusión es que no solo varía de una persona a otra, sino que depende del tipo de lupus y la gravedad de la afectación del órgano, pero también a tiempo, la capacidad de una persona para adaptarse, su estilo de vida y fuerza de voluntad.
PD. Mi Lupus está en remisión, pero entiendo que no hay nada permanente en la vida. Solo hay una suposición, que no hay ninguna. Por lo tanto, no me gusta pensar cuán doloroso ha sido el Lupus (o lo es aún, ya que deja algunos daños irreparables e inhabilidades). Prefiero pensar, vivir y disfrutar esta vida como una bendición que finalmente eleva el espíritu, la fuerza de voluntad para una vida de calidad con lupus (sin importar cuánto tiempo).