¿Se hereda la resistencia bacteriana o viral?

Sí, puede ser heredado. Como concepto general, esta es la razón detrás de la evolución de los antígenos leucocitarios humanos (HLA), también conocidos como complejos principales de histocompatibilidad (MHC). Todas estas moléculas presentan diferentes péptidos en la superficie de las células. Algunos péptidos de bacterias o virus pueden ser presentados por estos complejos, con la secuencia del péptido siendo detectada por la molécula de HLA. De esta manera, el sistema inmune de una persona puede “ver” la influenza de forma diferente a la de otra persona, una diferencia que ayuda a proteger a la humanidad de la erradicación de un patógeno.

Otra diferencia no relacionada con el sistema inmune son las mutaciones en diversas proteínas del huésped que pueden modular la infección. Un ejemplo para el VIH es una mutación en CCR5 que ocurre en un cierto porcentaje de la población. Los individuos homocigotos para esta mutación carecen de un correceptor necesario para la infección por VIH y, por lo tanto, son resistentes. Un ejemplo de malaria es la mutación drepanocítica, que ofrece un grado de resistencia en heterocigotos para esta mutación en la hemoglobina. Hay muchos otros ejemplos en la literatura de tales interacciones genéticas huésped / patógeno.

En resumen, la genética puede desempeñar un papel crucial en la resistencia a diversos patógenos y puede heredarse.