Su sistema inmune tiene un trabajo importante: defender su cuerpo de los invasores, como las bacterias y los virus, lo que significa que usted es dañino.
Pero cuando hace guerra a las sustancias que no debería, eso es una alergia.
Los cacahuetes, los huevos o el polen, por ejemplo, pueden desencadenar reacciones. Se llaman alérgenos.
Durante una reacción, su sistema inmune libera anticuerpos. Estas son proteínas que transmiten un mensaje a las células: ¡detengan esa sustancia! Las células envían histamina, que hace que los vasos sanguíneos se expandan, y otros productos químicos, y estos desencadenan los síntomas de la alergia.
Estos anticuerpos son de mente sencilla. Cada uno apunta a un solo tipo de alergeno. Eso explica por qué alguien podría ser alérgico a los cacahuetes pero no a los huevos.
Puede entrar en contacto con alérgenos de muchas maneras: a través de la piel, los ojos, la nariz, la boca o el estómago. Esto puede causar obstrucción de los senos paranasales, inflamación de la piel, dificultad para respirar o problemas estomacales.