La diabetes mellitus frágil es un término utilizado para describir la diabetes tipo 1 particularmente difícil de controlar. Aquellas personas que tienen diabetes frágil experimentarán oscilaciones extremas frecuentes (hacia arriba y hacia abajo) de los niveles de azúcar en la sangre. Estos cambios en los niveles de glucosa no son buenos para la salud y pueden afectar la calidad de vida o incluso conducir a la hospitalización. Los avances en el control de la diabetes han hecho que esta condición sea poco común, y el término no se usa con mucha frecuencia. Algunos también se refieren a esta condición como diabetes lábil. La diabetes frágil sigue siendo una preocupación entre los diabéticos. Es un signo de que su nivel de azúcar en la sangre está mal administrado.
Todas las personas con diabetes experimentarán en algún momento de su diabetes un cierto nivel de fluctuación en el nivel de glucosa en sangre. Pero, en general, estos cambios no son extremos o demasiado frecuentes y las personas llevan una vida normal. En la diabetes frágil, sin embargo, las fluctuaciones son más graves y tienden a dar lugar a frecuentes visitas al hospital, la interrupción del empleo y, a menudo pueden contribuir a problemas psicológicos como el estrés.
La mejor manera de prevenir la diabetes frágil es seguir un plan de salud establecido por su médico. Aquellos que tienen problemas psicológicos, incluyendo estrés y depresión, enfrentan un mayor riesgo de desarrollar esta condición. Esto puede ser tan simple como los problemas psicológicos que causan el descuido del cuidado de la diabetes (como la negligencia de comer alimentos saludables, tomar medicamentos o hacer ejercicio regularmente).
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