Depende de la gravedad del paciente y del nivel de experiencia que uno tenga con ellos. Crecí con una persona que padece el síndrome de Capgras y ella rara vez estaba cuerda. Crecí observándola y podía verlo en sus ojos cada vez que ella caía en el modo de locura.
Tiendo a ver a los demás con algunos problemas psiquiátricos a simple vista, e incluso con el caso más leve lo reconocí antes que la mayoría.