En el escenario sobre el que pregunta, la respuesta es no (pero más o menos). Permíteme explicarte:
Para que un medicamento se comercialice como eficaz (nota: esto no se aplica a los suplementos, que no tienen que funcionar en absoluto), debe demostrar que funciona independientemente de la creencia del paciente. La química debe demostrar un efecto notable en el paciente, en una dosis determinada. Si eso no funciona (o si no produce un efecto notable cuando el paciente no puede responder conscientemente, como cuando está comatoso), entonces no se aprueba, ya que el mecanismo a través del cual funciona es solo un placebo. En resumen, o funciona independientemente del conocimiento de los pacientes sobre los resultados esperados, o no es una medicina real.
Sin embargo, la mente puede ser increíblemente engañosa. Una persona puede creer que todavía está enferma cuando, de hecho, no lo está. Esto sucede con los hipocondríacos. Incluso cuando todas las pruebas son contrarias, una persona aún puede convencerse a sí misma de que la medicina no ha funcionado o las empeora. Esto es más común con los estabilizadores del estado de ánimo, pero se puede observar en casi cualquier droga.