¿Por qué el cuerpo confundiría una sustancia inofensiva por algo dañino?

Esta es una pregunta mucho más complicada de lo que parece ser. La primera pregunta debería ser ¿por qué el sistema inmune no aprende a tolerar los “antígenos” en nuestro entorno natural, generando una respuesta inmune contra ellos? Es posible que esto esté, en parte, genéticamente determinado, pero una influencia mucho mayor se relaciona con los antígenos a los que estamos expuestos muy temprano en la vida, probablemente durante el primer año más o menos. Durante este tiempo, el sistema inmunitario “tolerante” aprende a reconocer / tolerar a qué antígenos / sustancias no responder. Es bien sabido que un niño criado en un entorno que los proteja de los desencadenantes ambientales normales (criados en una burbuja estéril) generará una respuesta inmune a la mayoría de los antígenos comunes en nuestro entorno; esto es probablemente también parcialmente cierto de un niño criado en un entorno ultra limpio. Los niños criados en un entorno rural tienen un menor riesgo de asma, por ejemplo, porque están expuestos a muchos antígenos naturales durante sus primeros años. Se ha encontrado, en los últimos años, que cuanto antes se expone a un niño a los productos de maní, es menos probable que se desarrolle una alergia al maní. Parece, sin embargo, que existen antígenos que casi siempre desencadenan una respuesta alérgica en los humanos; un farmacólogo amigo mío me dijo una vez que todos los que trabajan con ratas de laboratorio durante un período de tiempo se vuelven alérgicos a ellos.

Traté de encontrar un artículo sobre este tema que no entre en las minutas de los tipos de células del sistema inmune, pero no tuvo éxito. Estoy seguro de que existen tales artículos.

Espero que ayude.

Respuesta súper simplificada para una pregunta relativamente compleja: el sistema inmune no usa el concepto de “inofensivo” y “nocivo”, usa “yo” y “no yo”. “No-yo” es el objetivo.