Lo que hace que cada uno de nosotros sea una personalidad única se puede resumir en tres factores: Pensamiento, Sentimiento y Comportamiento.
Cada tipo de terapia intenta cambiar uno o más de estos tres factores. Por ejemplo, terapia cognitiva, RET, terapia psicodinámica, etc. intenta cambiar el pensamiento. La terapia Gestalt se dirige a los sentimientos de uno. La terapia conductual, el ACT, la Terapia de la Realidad, etc. funcionan cambiando los comportamientos de uno.
Enumero terapias ‘cognitivas’ y ‘conductuales’ por separado porque el término popular “Terapia Cognitivo-Conductual” es un nombre inapropiado, ya que rara vez contiene algún componente conductual.
No solo los diferentes trastornos responden mejor a las diferentes terapias, sino que las diferentes personas responden mejor a diferentes enfoques. El trabajo del terapeuta es determinar qué enfoque será más efectivo para cada paciente o cliente.