La anestesia espinal es una de las formas preferidas de anestesia en la actualidad, si el tipo de procedimiento quirúrgico lo permite, por así decirlo, es bastante seguro en manos experimentadas y competentes, con la técnica, las precauciones y las herramientas correctas.
El agente anestésico se introduce en el espacio subaracnoideo por debajo del nivel donde termina la médula espinal (es decir, generalmente el borde inferior de la vértebra lumbar 1), por lo que se inyecta generalmente en el espacio entre L2-L3 o inferior, con el siguiente propósito:
- Para evitar cualquier lesión en la médula espinal durante la inyección de la droga
- Para evitar afectar los nervios espinales responsables de proporcionar el suministro del nervio motor a los músculos implicados en la respiración, ya que la parálisis de esos músculos se produciría creando estragos.
Ahora, ¿has intentado mezclar aceite con agua? No se mezclan y el agua se hunde y el aceite flota en la superficie, ya que el agua tiene una densidad mayor (el agua es, en cierto modo, hiperbárica en comparación con el petróleo).
Lo mismo es el caso con la lidocaína hiperbárica. Cuando se inyecta, no se eleva por encima del nivel del sitio de inyección, cruzando el líquido cefalorraquídeo.
En el caso de la lidocaína isobárica, su densidad es casi igual a la del líquido cefalorraquídeo y no se mezclan o la droga no se eleva por encima, para afectar los nervios espinales, imagine esas multicolumnas sin alcohol multicolores, donde dos capas no lo hacen mezcla.