Cualquier producto alimenticio o de bebidas puede estar relacionado con la diarrea, SI el producto consumido está contaminado con bacterias nocivas, virus u otras toxinas. Ningún producto preenvasado o embotellado llega al mercado sin haber sido manejado por humanos. Todo lo que toma a lo largo del proceso de producción es un contacto inadvertido con las manos sucias, o el equipo, para pasar el patógeno necesario. Considere el reciente brote de “Listeria” en un equipo popular de productores de helados. Tuvieron que dejar de producir y descontaminar cada una de las máquinas que entraron en contacto con el producto. Hasta el día, nadie sabe la fuente inicial de la contaminación.
¡Bacterias, virus y políticos son astutos de esa manera!
Además, genéticamente, algunos de nosotros simplemente no podemos metabolizar algunos alimentos y bebidas, y debemos evitarlos por completo o sufrir los síntomas resultantes. Piense en estos incidentes como “alergias” a los alimentos.