Esta es una dicotomía falsa. Obviamente, la nutrición es lo más importante que obtenemos de nuestra comida, pero la noción de que hay una compensación entre la nutrición y el sabor es un pensamiento desordenado y poco saludable. La idea de que la comida “sana” tiene que tener mal sabor es un pensamiento religioso deformado. La vida es demasiado corta para comer alimentos que no disfrutas.
Ver ¿Está [esta comida] saludable?