La cuestión es esta: lo que la mayoría de la gente piensa como “el efecto placebo” no existe como tal. Es un efecto estadístico que comprende una serie de efectos y sesgos, que (por buenas y prácticas razones) se agrupan en ensayos médicos y son malinterpretados por la prensa y el público como una gran idea sobre la materia.
El efecto placebo no existe por Petter Häggholm en Blag
Dicho esto, en cualquier grado que el “efecto placebo” consista en la sugestibilidad del paciente, no hay motivo para pensar que los niños no respondan. Por el contrario, su respuesta al malestar físico es notoriamente susceptible a la influencia social, como ocurre con el niño pequeño que cae pero solo llora una vez que alguien está mirando, o cuya rodilla con piel duele menos una vez que mamá lo besa mejor. ¿Qué mejor manera de pensar para informar una mejora de las píldoras de azúcar?