No es que el cuerpo maneje las calorías de manera diferente.
En general, la mayoría de los alcohólicos son delgados porque están desnutridos. Muchos de ellos no comen regularmente, cuando hay una cantidad limitada de dinero, a menudo optan por comprar alcohol en lugar de alimentos.
Además, mientras que el alcohol en pequeñas cantidades es un estimulante del apetito, en grandes cantidades, actúa como un supresor del apetito y el individuo no tendrá ganas de comer.
Recientemente tuve una conversación con uno de los asistentes regulares al Departamento de Emergencia, él me dijo que elige gastar su dinero en alcohol en lugar de comida por su adicción. Cuando estos pacientes comienzan a desarrollar insuficiencia hepática, el efecto es reducir aún más el apetito debido a las náuseas.
