4 cosas que pueden afectar cómo funcionan las enzimas:
- Temperatura: aunque una temperatura más alta aumenta la velocidad de reacción, las enzimas se desnaturalizan después de una cierta temperatura
- Nivel de pH: diferentes enzimas funcionan mejor a diferentes niveles de pH. El pH óptimo para una enzima depende de dónde funciona normalmente. Por ejemplo, la proteasa funciona mejor a pH 2, por lo tanto, se encuentra en el estómago
- Activadores: se unen a la enzima y la hacen trabajar más duro y más rápido
- Inhibidores: son lo opuesto a los activadores: ralentizan o incluso detienen la actividad de la enzima al alterar su forma (es decir, desnaturalizarla), haciendo que su sitio activo (lugar donde encaja la molécula de sustrato) sea inútil