La membrana plasmática es una de las partes más bellas de una célula. Hay una razón por la que lo llaman un “mosaico fluido”: esa membrana es una obra de arte compuesta por sistemas complejos para proteger a las células de las bacterias de los peligros en su entorno y dejar que los buenos entren (pero con mucho cuidado).
La membrana está compuesta de una bicapa de fosfolípidos y tiene todas las funciones generales de una membrana celular, como ser un transporte permeable.
Ciencia genial.
