Cómo decirle a mi médico que zoloft me da anorgasmia

Los efectos secundarios y otros cambios relacionados con los medicamentos son importantes para abordar de manera muy directa, honesta y sin depender de alusiones o eufemismos.

Son profesionales médicos: leyeron, escucharon e incluso trataron muchas cuestiones delicadas. El potencial de efectos secundarios que son difíciles de analizar para algunas personas es parte de la razón por la cual tener un médico en quien confíe y con el que se sienta cómodo puede ser útil para lograr una buena calidad de atención, especialmente en situaciones donde se recetan medicamentos.

Esto es algo de lo que debe ocuparse lo antes posible, ya que los efectos secundarios de medicamentos como Zoloft pueden ser a largo plazo o durar indefinidamente, incluso si deja de tomar el medicamento que causó el problema. Tenga cuidado con los médicos que tratan de inyectar aún más medicamentos al problema, especialmente porque otros psicotrópicos también conllevan el riesgo de disfunción sexual.

Muchas o la mayoría de las pacientes que toman antidepresivos ISRS experimentan disfunción sexual; usted no es inusual ni menciona algo raro o apenas conocido. El funcionamiento sexual es una parte muy importante de la vida de la mayoría de las personas, así que no se demore en hablar de este efecto secundario o arriesgue su salud a corto y largo evitando lo que le dice a su médico.

Opciones adicionales:

Si te hace sentir más cómodo, puedes delinear una secuencia de comandos para que puedas acceder a los detalles específicos. Por ejemplo, puede comenzar mencionando que ha notado algunos cambios negativos con los que no está de acuerdo. Luego puede especificar que este en particular sea de naturaleza sexual, y solo luego continuar hablando de problemas de orgasmo. Si es un buen médico, se harán preguntas sobre las circunstancias y experiencias que podrían ayudar a discernir qué cambios podrían ser más efectivos para eliminar su efecto secundario.

Si esto todavía suena demasiado desalentador, puede hablar con un amigo, miembro de su familia o amante al hablar sobre este tema, o puede intentar escribir una nota en lugar de hablar en voz alta en la primera cita que aborda el tema. Asegúrese de que su médico lo lea y comprenda completamente el problema. Esté preparado para ofrecer información adicional para que su situación se comunique con mayor claridad; su salud y seguridad están en riesgo a causa de los medicamentos que alteran el cerebro, por lo que es esencial controlar sus efectos secundarios y riesgos.