La leche de vitamina D tiene vitamina D añadida.
Al igual que la mayoría de los alimentos enriquecidos, el hábito de enriquecer un alimento específico se debe a las enfermedades de deficiencia generalizadas en una población. Hoy en día, normalmente enriquecemos la harina con niacina, porque la pelagra era común en el sur, la sal con yodo, porque teníamos problemas significativos con el bocio y la leche con vitamina D, porque había muchos niños que crecían con raquitismo.
Si consume alimentos ricos en vitamina D, o si se expone mucho al sol y puede sintetizar su propia vitamina D, no necesita enriquecerse con ella. Pero debido a que había un problema a nivel nacional con la deficiencia, se volvió típico resolverlo de esta manera.
Irónicamente, hace unos años, cuando los padres se cuidaron de mantener a sus hijos fuera del sol para evitar el cáncer de piel y también comenzaron a evitar los lácteos para protegerse de las alergias a los lácteos, los pediatras comenzaron a ver el raquitismo regresar. Según tengo entendido, el problema se ha solucionado en la actualidad, ya que las personas se dieron cuenta de que estaba sucediendo y ahora se aseguran de que sus hijos reciban suficientes vitaminas.
