He tratado y visto la resolución en al menos una infección conocida por estafilococos resistente a antibióticos, que se presenta como paroniquia, con aceites esenciales: aceite de árbol de té y aceite de orégano. Esta bacteria se probó y confirmó durante el tratamiento con antibióticos que no eliminó al paciente de la infección. La infección reapareció poco después de que finalizaran los antibióticos y solo se resolvió con punción y aplicación tópica de los aceites mencionados anteriormente.
Mientras escribo esto, hay muchos laboratorios que prueban químicos con potencial para ser usados en lugar de antibióticos; particularmente los utilizados en el ganado, que consumen más del ochenta por ciento de los antibióticos producidos en los Estados Unidos. Los productos químicos que se están probando son capaces de muchas cosas, incluida la descomposición de las paredes celulares de los Superbugs gramnegativos, deteniéndolos así e inhibiéndolos de progresar y evolucionar aún más. Carvacrol es uno de los productos químicos que se estudian. Se encuentra en ciertos aceites esenciales y se ha demostrado que tiene un efecto desintegrador en la membrana externa de bacterias Gram negativas.
Actualmente estoy en el proceso de escribir una serie sobre este tema. Primero, discuto algunos conceptos básicos de Superbugs y cómo llegaron a ser y continúan impactando a la sociedad. En los días siguientes profundizaré en los mecanismos de acción de los componentes químicos de los aceites esenciales y su potencial para tomar el lugar de un gran porcentaje de antibióticos.
Echa un vistazo a mi blog y sígueme para recibir actualizaciones sobre el tema en constante evolución.
Disminución de la resistencia a los antibióticos con aceites esenciales: primera parte
Lo que no los mata los hace más fuertes: parte 2 de una serie sobre resistencia a los antibióticos y aceites esenciales
