Como lo indicaron los otros encuestados, la respuesta puede ser complicada. Sin embargo, la regla de cinco de Lipinski proporciona una breve lista de verificación para compuestos similares a los medicamentos. Incluyen:
- No más de 5 donantes de bonos H
- Una masa molecular no mayor a 500 daltons
- Un log P no mayor que 5
Sin embargo, incluso cuando las proteínas pasan los tres criterios de la regla de cinco (que a menudo no lo hacen debido a su tamaño), la vía de administración puede seguir siendo un obstáculo importante para el desarrollo de fármacos. Las píldoras son la forma de dosificación con el mayor nivel de cumplimiento, pero la ingestión de productos biológicos por vía oral puede hacer que sean digeridas o desnaturalizadas en el tracto gastrointestinal, e incluso si no están sujetas al metabolismo de primer paso. Debido a su tamaño, las proteínas son difíciles de administrar por vía transdérmica. La gente odia recibir inyecciones y goteo intravenoso, y pagar a los profesionales de la salud para que los administren es costoso.
La solubilidad es otro problema. ¿Puedes disolverlo en aceite o agua a una concentración lo suficientemente alta para una dosis eficaz? DMSO es genial, pero no desea inyectar a nadie (o animales de laboratorio) con más del 2% de solución DMSO. Las nanopartículas son un buen trabajo, pero vienen con un nuevo conjunto de desafíos.