El consumo excesivo de alcohol puede causar deshidratación en una variedad de formas. En primer lugar, el alcohol disminuye la producción del cuerpo de la hormona antidiurética, que el cuerpo utiliza para reabsorber el agua. Con menos hormona antidiurética disponible, su cuerpo pierde más líquidos de lo normal a través de una mayor micción. Beber cantidades excesivas de alcohol también puede causar vómitos , lo que agota el cuerpo de los líquidos y puede causar una mayor deshidratación.
Los efectos del alcohol varían de persona a persona, pero en general, cuanto menos pesa una persona, menos alcohol se necesita para causar deshidratación o vómitos. El Consejo Nacional de Salud e Investigación Médica recomienda que los hombres y las mujeres no beban más de cuatro bebidas estándar en una sola ocasión. Beber más de esta cantidad se considera excesivo y puede aumentar el riesgo de lesiones relacionadas con el alcohol.