La TSH y la glucosa en sangre son dos cosas diferentes, por lo que no se pueden comparar. El azúcar en la sangre se libera cada vez que comemos alimentos. Puede subir y bajar dependiendo de la frecuencia de los alimentos que tomamos.
La TSH, por otro lado, depende de varios factores diferentes, como el nivel de estrés, la salud actual de la tiroides y también de los alimentos que comemos durante el día. La TSH es liberada por la glándula pituitaria en el cerebro para estimular la glándula tiroides y liberar la hormona tiroidea.
El azúcar en la sangre se relaciona principalmente con los alimentos, pero la TSH es más compleja en su naturaleza y proceso que el azúcar en la sangre.
