Los antagonistas cannabinoides (http://en.m.wikipedia.org/wiki/C…) están (¿han sido?) Desarrollados por numerosas compañías farmacéuticas como medicamentos contra la obesidad. El razonamiento detrás de este enfoque es bastante directo. Es un hecho bien conocido que el consumo de cannabis causa una intensa sensación de hambre (munchies). Ahora se entiende bien que esto ocurre a través de la activación del sistema cannabinoide por THC (el componente activo de la marihuana). Por lo tanto, si bloquea este sistema, debería (teóricamente) evitar este impulso continuo de comer.
Aunque algunos medicamentos se desarrollaron (en los años 90) y finalmente Rimonabant fue aprobado por la FDA en 1994, resultó que causaban sentimientos suicidas en pacientes a los que se les prescribió este medicamento. Rimonabant fue removido del mercado.
Con una mejor comprensión de su farmacología, se descubrió que Rimonabant es realmente un agonista inverso (podría ser un término complicado para explicar a un especialista en biología / no quimioterapia, pero puede leer sobre él desde Wikipedia). No ser un antagonista “verdadero” es ampliamente considerado como la causa raíz de esos efectos secundarios. Por lo tanto, se están realizando numerosos esfuerzos para desarrollar un verdadero antagonista neutral.
PD. Encontraré informes de noticias de compañías que están trabajando abiertamente en este problema y actualizo esta respuesta lo antes posible.