¿Cómo pueden mejorarse los programas de almuerzos escolares para promover la salud?

– Cortar o eliminar azúcares.

– Reemplace los carbohidratos refinados con granos integrales.

– No freír nada nunca.

– Cocine los ingredientes frescos tanto como sea posible. Sin alimentos congelados, enlatados o preenvasados.

– Use hierbas y especias reales en lugar de saborizantes artificiales.

– Evite los panes y aceites bromados.

Es una batalla cuesta arriba. Jamie Oliver dio todo lo que tenía para cambiar los hábitos alimenticios de una pequeña ciudad estadounidense, y no recibió más que pena por sus problemas.