Haga las gachas de la forma habitual.
Usando un recipiente más pequeño, sírvete una porción más pequeña de lo normal.
Coma con una cucharilla en lugar de un postre o una cucharada.
Hable con sus compañeros de casa mientras come o lea el periódico.
La idea es hacerte ver un bol entero aunque la porción sea más pequeña y comer despacio disfrutando de tu comida.
Si todavía tienes hambre, puedes tener segundos, pero también comer lentamente.